Al parecer, el osito no es tan tierno en todo el mundo y es que, fue censurado en China ¿La razón? Pues, que Winnie the Pooh se ha convertido en símbolo de la disidencia política por el parecido que muchos encuentran entre el animal y el presidente chino, Xi Jinping.

Las comparaciones entre ambos comenzaron en 2013, cuando se hizo viral la publicación de una imagen de Xi caminando junto al entonces presidente estadounidense, Barack Obama, junto a otra de Winnie y su amigo Tigger en posiciones ciertamente similares.

 

Un año después, una foto del mandatario asiático estrechando la mano del primer ministro de Japón, Shinzo  Abe, se hizo igualmente popular al publicarse junto a otra de Winnie the Pooh con el burro Ígor.

A medida que los 'memes' comenzaron a ganar popularidad, los censores chinos comenzaron a bloquear fotos, GIFs y menciones al oso en las redes sociales y ahora, la nueva película del oso, producida por el gigante Disney.