Isabella Falco ha soportado bastante en Casa de Muñecos. Primero se enteró que su marido, José Luis Hurtado (Álvaro Morales), había tenido una relación homosexual en paralelo a su matrimonio, luego determinó mantener eso en secreto para el resto de su familia y ahora ha decidido darle una nueva oportunidad a su esposo, creyendo que lo de él fue una aventura pasajera.
"Claramente se puede pensar que ella no tiene límites con tal de seguir con José Luis, y es así, porque para ella no hay otra vida. Si ella no sigue con su marido, con sus hijos y con su familia, simplemente se muere, no tiene otra vida", destaca Celine Reymond.
En ese sentido, la actriz añade que "para Isabella su familia es todo y por eso es que no ve más allá y está dispuesta a hacer lo que sea con tal de mantenerla. En el fondo, que esta costumbre y vida de años se mantenga por siempre".
Reymond pone énfasis en que "sin su marido, para ella no hay vida, así de categórico, y desde ahí que ella haga de todo para retomar su vida de antes, como el entender una posible bisexualidad de él. Para eso se trata de poner en su lugar y hasta llegó a ir a un bar bisexual y besarse con otra mujer".
Celine agrega a lo anterior que "ella necesita entender a José Luis para perdonarlo y lograr lo que ahora está logrando, que es darle una nueva oportunidad y hacer, al menos ante los ojos del resto, que aquí no ha pasado nada".
