Óscar está muy preocupado por la repentina aparición de la madre de Moisés, no la conoce pero sabe que la joven mujer quiere recuperarlo y conocerlo luego que se lo hayan quitado al momento del nacimiento del niño.
Pero tras conversarlo con el padre Gabriel, Hernán y Elena, decidieron que Óscar debía ir a hablar con Erika para solucionar el problema con discreción, sin que Moisés se entere por un tercero que su madre lo anda buscando.