Carolina vive momentos difíciles en el convento. Óscar intenta consolarla desde la Isla con su llamada y una emotiva sorpresa que hizo llegar al lugar donde está. Pero la tranquilidad no dura mucho.

La abogada de Carolina trae noticias y es que Carlos nuevamente se salió con la suya, pero esta vez poniendo en peligro la propia demostración de la inocencia de quien fue su esposa.

El rostro de Carolina pasará de la alegría al pánico al momento de enterarse de que su exmarido acabó con evidencia clave para demostrar que ella no estuvo involucrada en la estafa por la que los persiguen.