El amor de Sofía (Montserrat Ballarín) y Franco (Nicolás Oyarzún) ha marcado el devenir de Isla Paraíso. No obstante, primero apareció Juliette (Constanza Mackenna) y quedó embarazada, supuestamente, de él; y ahora ha vuelto al pueblo Rodrigo (Ignacio Garmendia), el ex novio de ella. Y, como es la vida, Juliette y Rodrigo se conocieron y unirán fuerzas para lograr sus objetivos: el de ella estar con Franco y el de él, estar con Sofía.
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"En realidad a los dos les conviene que el otro haga bien su pega, en el caso de ella, que Rodrigo se acerque y distraiga a Sofía, y en el caso de él, que Juliette haga lo mismo con Franco", señala Constanza Mackenna, agregando que "se convierten en los grandes antagonistas de esta historia de amor de Franco y Sofía".
Por su parte, Ignacio Garmendia señala que "ambos personajes tienen el mismo objetivo, entonces eso los va a unir, desde el lugar de recuperar lo que ellos creen que les pertenece".
El actor pone énfasis en que "es entretenido hacer personajes desde esta arista porque te permiten jugar y hacer cosas bien diversas y divertidas".
Y para ello, tanto Juliette como Rodrigo utilizarán distintas estrategias. "Ellos claramente van a complicar las cosas y en especial ella, que ya hemos visto que no tiene límites. Juliette va de mal en peor".
Eso sí, Mackenna señala que estos dos roles solo estarán unidos desde ahí, desde el propósito de distanciar a Franco y Sofía: "Solamente los une el fin de separar a esta pareja, no hay nada más que los unirá".
