Fabián se negó rotundamente al saber que era padre y, sobretodo, le dio la espalda a Isidora y Emilio cuando se acercaron a él. Pero la curiosidad y su buen corazón lo obligaron a revisar de qué se trata la enfermedad que padece el pequeño Nicolás.

Lo que no imaginó es lo doloroso y mortal que es el cáncer de médula al no ser tratado o no conseguir un donante, lo que hizo emocionarse al mecánico. ¡Revive el emotivo momento!